Estar sólo cuando estás acompañado es como caminar por el
borde de un precipicio.
Es pasar los días con alguien que comparte tu espacio pero no está en él.
Alguien que
comparte el mate pero no la mateada.
Alguien que te ve pero no te mira, que te
escucha pero no interpreta.
Estar sólo cuando estas acompañado es un camino en el que
esas almas que eran gemelas se empiezan a volver desconocidas,
la incomodidad
se hace presente y el silencio imponente.
Se hace difícil pensar cosas de a dos
porque hay la desconfianza típica de dos desconocidos.
Estar sólo cuando estas acompañado es sentir que se está
terminado algo,
es presentir el fin de una historia, es hacer tiempo, tener la
pelota un rato más cuando sabes que es inevitable la derrota.
No hay comentarios:
Publicar un comentario